Punta de Jandía

 

Punta de Jandía es el lugar más suroccidental de Fuerteventura. Se llega allí por una pista que comienza un poco más arriba de la explanada del nuevo puerto de Morro Jable. Esta pista, que está asfaltada en un pequeño tramo hasta el cementerio, se bifurca más tarde, cruzando el tramo derecho la divisoria de aguas hacia Cofete y siguiendo el izquierdo hasta Punta de Jandía, hasta donde desde Morro Jable se tarda aproximadamente una hora. Todo el extremo suroccidental de Jandía forma parte del Parque Natural del mismo nombre.

Hay muchas formas de conocer la naturaleza en esta área costera más occidental de Fuerteventura. Hacer la ruta propuesta completa puede ser algo fatigoso, debido a que es una zona sin sombra y batida a menudo por el viento, pero nos da también la visión más completa de la zona.

Desnivel
18 m.

Duración
4 horas

Distancia
12,4 km.

Dificultad
Difícil

Detalles del Recorrido

Comenzamos en el faro de Jandía o el Puertito de la Cruz, y nos dirigimos hacia el Norte bordeando siempre el litoral. Desde el cantil se tiene una magnífica vista panorámica de la accidentada costa, y en algunos lugares bajan pequeños senderos a las playas que se encuentran intercaladas.

Recordamos que estos senderos estrechos y de fuerte pendiente no tienen barandillas ni otros elementos de seguridad, y que también el baño en las playas debe de hacerse con mucha precaución.

Hacia el interior se extiende una amplia llanura arenosa con vegetación baja, que falta por completo en una antigua pista de aterrizaje que se extiende junto a la pista, más o menos a la altura de Punta del Corralito.

Llegados a Punta Pesebre, la vista puede extenderse por toda la solitaria playa de Cofete. Siguiendo por la costa, ahora en dirección sureste, llegaremos finalmente a Caleta de la Madera.

Es también factible ir con bicicleta o coche y parar en diversos lugares para ver el paisaje o bajar a alguna de las playas. Más al este de Punta del Pesebre la circulación de vehículos está prohibida, como tampoco está permitido en ningún lugar salirse de las pistas marcadas.