Hornos de cal del embarcadero

La peculiaridad de estos hornos, además de su gran tamaño, es el que han sido excavados directamente en la roca, algo único en Canarias.

En su interior se encendían potentes fuegos capaces de quemar el caliche y transformar el carbonato cálcico en cal, que luego se embarcaba directamente desde aquí.

El producto obtenido en estos hornos era de gran calidad, pues se abastecía de piedra compuesta por el esqueleto de caparazones y esqueletos de animales marinos fosilizados. Se empleaba sobre todo para albear o pintar las edificaciones.